25 de agosto de 2017

Nuestro gozo en un pozo.



Como en la vida nada es perfecto, nuestras rutas no siempre van a salir perfectas.












                       Íbamos a ver éso pero fue lo que se dice: Nuestro gozo en un pozo. 







Papá tenía un recuerdo y era ir de jovenzuelo con unos primos suyos a unas pozas o piscinas naturales cerca de Sevilla. Estos primos tenían familia en la localidad de Brenes y cerca de allí existían unas pozas  en las cuales se chapoteaban en verano. Así que esta mañana decidimos ir hacia allí y hacer otra ruta de ida y vuelta. Íbamos ilusionados, preparados para bañarnos. Nuestros pies estaban calzados como lo exigía la ocasión. Llevábamos suministros para el recorrido y sobre todo íbamos con ganas de remojarnos. No es la primera vez que nos bañamos en un río, y como lo hemos experimentado,  las ganas iban en aumento. 

Nos dirigíamos a Villaverde del río para sumergirnos en las pozas naturales. Pues nuestro gozo en un pozo.


Qué costará meter en una bolsa los desperdicios y echarlos al primer contenedor o incluso llevártelos a tu casa si hiciera falta. Pues no. Hice fotos pero por respeto a la naturaleza, bueno, y porque tardan un quintal en subirse, no las voy a poner. Mierda, mierda y más mierda miraras donde miraras. O la gente es muy guarra o al ayuntamiento se le olvida pasar por allí o las dos cosas a la vez. 

Vale que estamos a finales de agosto y no voy a encontrar aquello muy verde pero como se supone que había agua porque así nos lo habían dicho....pues NO. Más seco aquello que una mojama. ¡Un calor! Grillos y grillos cantando por todas partes. Nadie allí, ¡quién iba a ir hasta allí! ¡Si no hay agua! 

Nuestro gozo en un pozo. Ni agua, ni verde, ni pozas naturales, ni cascada, ná de ná. 

¿Qué mereció la pena? y ¿por qué hago esta pregunta después de como estoy pintando el panorama? Pues porque siempre merece algo la pena.

1. Nos hemos reído.
2. Hemos caminado por rocas muy chulas.
3. Os habéis sentido exploradores.
4. Habéis visto al iluso de papá coger un higo chumbo y llenarse los dedos de púas.
5. Hemos visitado la Ermita de Nuestra Señora de las Aguas.
6. Estabábamos cerca de casa porque si no....
7. Y lo mejor, hemos estado los cinco juntos, #enfamilia. Mi hanstag preferido.


¿Volveremos? Pues ya lo veremos  en los posts siguientes que escriba pero ciertas cosas merecen segundas oportunidades. Será que este año ha llovido poco. Quizás para una ruta de invierno. 









Besos mamá. 


Nota: parte de la información la saqué de aquí: las calderas de Villaverde del río.




14 de agosto de 2017

Otra ruta de ida y vuelta!





Si estáis en un futuro sin saber dónde ir, con vuestras parejas, solos, con amigos o con vuestros retoños, os voy a recordar un ruta de ida y vuelta,desde Sevilla, que hicimos una vez. En el presente, fue hace poquito.  Seguir leyendo.






Hace unos días  nos lanzamos a la carretera y entre curvas y más curvas, finalmente echamos un día estupendo y para recordar. Era un ruta de esas de ida y vuelta, de esas para desconectar de la rutina y de esas que hacen ver el día desde otra perspectiva. Un pueblo ya lo conocíamos y el otro no. Vosotros no conocíais ninguno de los dos. Dos pueblos tan distintos pero a la vez tan disfrutados.


Ya sabíamos que las curvas nos la íbamos a encontrar en la carretera. Fuímos poco a poco mentalizándonos, más por vosotros. En estos entornos hay que centrarse en lo que te rodea de la naturaleza y así derrotar a tu enemigo en ese momento: la fatiga. Al final no pudimos combatirla pero como sois grandes guerreros, duró poco. Una vez pasada la batalla disfrutamos juntos de lo lindo.

A 20 km de Ronda, adentrándonos en la sierra y rodeando de montañas rocosas y de varios pueblos blancos, nos encontramos con Júzcar. Pero también lo llaman así:




                                                    Júzcar, el primer pueblo pitufo del mundo. 


La , la , la, la, la , laaaaaa, laaa, laa, la, la, laaaaaaaaaaaaaaaaaa. ¡¡¡Seguir cantando!!!



Júzcar tiene un entorno muy agradable. Nosotros hemos ido en agosto pero imagino lo verdoso que tiene que estar en invierno y el fresquito que tiene que hacer. Limita al norte con el municipio de Ronda; otra visita obligada y así fue. Júzcar está construido en una hondonada, rodeado por el río Genal, que por cierto, hay una ruta interesante y lúdica para hacer y que el blog Sapos y princesas nos lo cuenta super bien.

Este pueblo, tan celeste en la actualidad, vivió y experimentó en sus calles la expulsión de los moriscos, repoblándose generaciones tras generaciones hasta la actualidad. Cuenta con 221 juzcareños, que a raíz de lo que vimos, viven muy alejados de los molestosos ruidos de la capital. 

Curiosidad! La primera fábrica de hojalata de España se asentó en este pueblo debido a la producción de  madera de la zona. 

¿Pero por qué eso de ser el primer pueblo pitufo?


En el año 2011, se estrenó la primera película a nivel mundial de Los Pitufos. Una agencia de publicidad madrileña,  Bungalow25,  que colaboraba con el lanzamiento de la película, decidió, tuvo la idea original y única de querer pintar a este pueblo de azul, celeste más bien, como ellos, como los pitufos. A partir de entonces, y por votación de los juzcareños, cada mañana al salir de sus casas, éstas se verían de color pitufo y decidieron que niños y no tan niños disfrutaran de su entorno. 

No sabemos cuánto tiempo estará este pueblo así, algo me han comentado sobre una cesión del convenio con Disney. Al día de hoy sigue celeste. 







Tras un poco más de una hora allí, Júzcar y sus pitufos estaba visto y vivido. Nos hicimos muchas fotos, muchas! Os gustó mucho. Aún recuerdo vuestra primera impresión al llegar. Eso se queda en mí, en nosotros. 


Pero el día todavía no había acabado y necesitábamos ver más. Así que Ronda nos esperaba!!!




Historias de bandoleros, cuevas y doncellas rodea la ciudad de Ronda. Su Plaza, la arena, los toros y los toreros. Sus paredes blancas. Sus flores. Su puente y su tajo rocoso. Autores literarios enamorados hasta las trancas de todas las letras de esta hermosa ciudad. Hay tanto qué ver y qué sentir en Ronda. Y así lo hicimos. Espero que a lo largo de vuestras vidas volváis. Cada visita es única. Una fuente de redescubrimiento. A tu aire o guiado, descubrirla y estudiarla es un lujo. 

Caminamos por sus callejuelas. Cruzamos su puente grande y el chico. Corristeis entre sus cuestas. Entramos en la plaza y recorrimos toda ella. Disfruté viendo ventanas y balcones. En definitiva, explotamos el día al máximo. Y es que un día puede dar para mucho. 
















En Júzcar me topé con  un cartel que decía ésto...¿Tú qué dices?




Besos mamá.






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